jueves, 13 de junio de 2013

2013: ‘el año del relleno sanitario’


 2013: ‘El año del relleno sanitario’


 

La meta es posicionar a nivel nacional a  Latacunga como una ciudad pionera en el tratamiento y disposición final de la basura.
 
“Estamos (Epagal) vigentes gracias a que la actual administración municipal creyó que el tema de la basura es un trabajo importante no solo para el cantón y la provincia, sino para el país y el planeta”.
Así, el gerente de la Empresa Pública de Aseo y Gestión Ambiental de Latacunga (Epagal), Francisco Estrella, describió la base con la que en el presente año, el Gobierno Autónomo Descentralizado Municipal del Cantón Latacunga y esa institución, proyectan la construcción definitiva del nuevo Relleno Sanitario.

Gestión integral
Un modelo moderno de gestión integral en el manejo de desechos sólidos (basura), comprende segmentos como la recolección óptima, transporte adecuado de los desechos, y disposición final.
Según explicó Estrella, la meta para el año que inició “es cerrar ese circuito (manejo integral); en Latacunga hemos avanzado muchísimo en lo que es recolección y transportación de basura”, a lo que se suma la transformación del botadero de basura de Pichul, en una zona de manejo controlado de desechos.
“Pero, es tiempo de dar el siguiente paso, la parte final, la más álgida diría no solo en el cantón sino en el país, tener una disposición final de los desechos que sea técnica y adecuada, pionera no solo a nivel nacional sino también internacional”, dijo.

Trabajo mancomunado
¿Se ha preguntado usted a dónde llega su basura o qué se hace con ella? Esa será otra de las metas para Epagal este año, “que la gente conozca qué pasa con la basura, que se adentre más en el proyecto, y que entienda que botar un desperdicio en la calle es algo tan dimensionado como ser un gran mal ciudadano, porque al final, alguien tiene que tratar esa basura (recoger, transportar y destinar su disposición final)”.
“Queremos que la ciudadanía se convierta en un grupo de generadores conscientes; que generemos la basura necesaria, que aprendamos a reutilizar”.

La proyección
Desde hace 33 años, toda la basura que se genera en el cantón llega hasta el denominado botadero de Pichul. El manejo de los desechos en ese lugar era inexistente (foto archivo/abajo izquierda), es decir, se formó una montaña desmedida de basura sin ningún tipo de tratamiento o prevención para minimizar las afectaciones ambientales.
Con la creación de Epagal, esa realidad se transformó de un basural desmedido a un botadero controlado. Sin embargo, este lugar, según los estudios de la empresa pública, tiene capacidad para para recibir los desechos de la ciudad por aproximadamente dos años más, por lo que “el siguiente paso” es la construcción definitiva de un Relleno Sanitario que cumpla los estándares internacionales, con una vida útil de hasta 50 años.
Esa “mega-obra”, como ha sido calificada por Francisco Estrella, tiene un costo-inversión aproximado de 5 millones de dólares, recursos que serán financiados según el proyecto por autogestión, “porque vamos a aprovechar la basura, la vamos a reutilizar”.
“La primera etapa del relleno sanitario la podemos construir en esta administración municipal, estamos decididos a hacerlo, el señor alcalde Rodrigo Espín, quien es además el presidente de la empresa (Epagal), ha dado todos los parámetros y nos ha fijado las metas (...). El trabajo será por segmentos”, explicó Estrella.
Se prevé el proceso de cierre del botadero controlado y simultáneamente la construcción del relleno, pero además, la determinación (estudio) de qué tipo de desechos se recibirán en la nueva instalación, porque serán industrializados y comercializados “para enterrar lo que verdaderamente ya no sirva”.

Los primeros pasos
En la actualidad se construye, con fondos propios, una estación de pesaje y el denominado ‘Centro de recuperación y aprovechamiento de materiales’, que es “uno de los primeros en la zona centro sur” y que tendrá una capacidad de gestión (clasificación de desechos reutilizables) de 200 toneladas diarias. Ese ‘mega centro de recuperación’ será concebido como un eje de negocios.
La tarea de este lugar es recibir y pesar los desechos, luego clasificarlos y separarlos en un total de 22 ítems recuperables (materiales aptos para reciclaje y reutilización como cartón, papel, madera, aluminio, plástico, otros), para “enterrar únicamente solo lo que ya no se necesita, porque incluso la materia orgánica (restos de comida) serán convertidos en abono”.
En la actualidad, la chatarra (basura metálica) que es recuperada en Pichul, es comercializada con Novacero, lo que genera recursos propios a Epagal. Ese proceso se hará con el resto de ítems recuperables.

La proyección
El Presidente Epagal (Rodrigo Espín, alcalde) dispuso que en este año se destinen 500 mil dólares del presupuesto de la empresa para la realización de los estudios del nuevo relleno: estudios de inversión, de ingeniería y ambientales.
El perfil de proyecto deberá ser oficializado ante el GAD Municipal de Latacunga y el Ministerio del Ambiente hasta finales del primer trimestre del año (marzo), para posteriormente realizar la contratación de estudios, y, esa presentación, sea ejecutable al iniciar el segundo semestre de este año.
“Lo que vamos a proponer al Ministerio del Ambiente es que nosotros (Epagal) paguemos todos los estudios con recursos propios, e incluso buscaremos una línea de financiamiento, y que ellos nos brinden su apoyo para la gestión del crédito”, especificó Estrella.

Datos técnicos
Un relleno sanitario puede ser comprendido como la excavación grande de una montaña (cubeto), área que luego es técnicamente recubierta con membranas especiales para evitar la filtración de lixiviados (substancias producto de la descomposición) y gases de forma directa al suelo.
Los desechos, luego de ser clasificados y reutilizados, son compactados por celdas, tratados con la misma tierra excavada, hasta finalmente obtener la forma original de la montaña, que será reforestada y estéticamente restituida.
El botadero controlado de Pichul (predio Inchapo) tiene un área total de 19 hectáreas, de esas, en la actualidad apenas cuatro han sido ocupadas por basura. Por ello se prevé  realizar una excavación de aproximadamente 350000 m2 de tierra, cerca de 45 metros verticales (30 desde el suelo hacia arriba, y 15 hacia abajo). La tierra excavada será almacenada en cuatro hectáreas del mismo lugar, ese proceso duraría aproximadamente siete meses y es la etapa más costosa dentro del proyecto.
Ese trabajo permitirá además determinar “qué pasó con los lixiviados del botadero actual, será una fuente de investigación para la empresa y para las universidades de todo el país”.
En conclusión, Francisco Estrella, gerente de Epagal, sintetizó el proyecto manifestando que “el relleno debe ser un complejo sanitario, en el que podamos captar toda la basura del cantón, procesarla, tratarla, devolver en servicios y ayuda social a la ciudadanía todos los recursos económicos que ahí se generen, y principalmente, devolver a la gente los desperdicios orgánicos convertidos en tierra y abono para las plantas de su casa, es un círculo dinámico en el que todos seremos beneficiados”.

 
DATO:
En Ecuador existen más de 220 municipios, solo 8 tiene relleno sanitario y de esos, apenas 4 cumplirían con un verdadero manejo adecuado en la disposición final de desechos.

 
LA FRASE:
 “El cantón crece y se desarrolla, y a la par genera más basura, por ello la necesidad de pensar ahora en el futuro de todos nosotros y de nuestros hijos”.
Francisco estrella, gerente de Epagal.