jueves, 16 de septiembre de 2010

Pujilí 'Tierra de delicias'

Estimados amigos,
Ser parte del Ecuador, incluye no solo vivir en un paraíso único en el universo; ser ecuatoriano, es también tener la fortuna de saborear los platos más exquisitos y tradicionales de la gastronomía mundial. Apreciemos lo nuestro

Fotografías y Texto: R. PAÚL LÓPEZ CHAMORRO
OPIP.-.EntretenimientoS
producción audiovisual creativa



Pujilí 'Tierra de delicias'

Pujilí es rico no solo por su gente y su folclor, las habilidosas manos de su pueblo lo convirtieron también en un paraíso para el paladar.

Llegar a la ‘Tierra del Danzante’, ‘El Emporio Musical Cotopaxense’, y no disfrutar de sus platillos tradicionales, sería definitivamente un grave error para aquellos turistas locales y extranjeros, que han visitado los distintos atractivos turísticos de Pujilí.
La tradicional gastronomía del cantón, se ha convertido con el pasar del los años, en una fuente de trabajo para sus habitantes quienes con habilidad e ingenio, han creado y perfeccionado platos únicos en el país, a partir de los productos que se generan en la zona.

El hornado
Tradicional plato compuesto principalmente de carne de cerdo, se lo acompaña de tortilla de papa y agrio. La elaboración de este producto, data en el cantón con más de 100 años de historia.
Según comentó Jorge Herrera, turista proveniente de la ciudad de Quito, “el sabor del hornado de Pujilí es único, porque la carne (de cerdo) es más suave y jugosa”.
El domingo es el día de feria en el cantón y por tanto, el día con mayor afluencia de clientes en el Patio de Comidas de Pujilí. El platillo, dependiendo de quién lo consuma, suele ser acompañado con aguacate o mote. Su costo actual oscila entre los 2,50 y 3 dólares.

La morcilla

Digna Iturralde, comerciante de las morcillas de sal y dulce, explica que este platillo es confeccionado con los intestinos de chancho, a los que se rellena de arroz, col, orégano, zanahoria, cebolla, azúcar, panela, crema de leche y especias.
“Un plato de morcilla no tiene precio, es decir, se vende lo que el cliente pida, lo importante es que disfrute de algo verdaderamente exquisito; quisiera invitar a todos para que nos visiten en el Patio de Comidas”, concluyó.


El
chaguarmishqui
Este delicioso manjar nace en el corazón de la cabuya (penco) y lo más importante de su producción, es que el proceso demora de ocho a nueve años, según comentó María Ronquillo, hija de la única vendedora de chaguarmishqui en el Patio de Comidas de Pujilí.
“Cuando se ha recolectado suficiente cantidad de néctar, se lo mezcla con cebada pelada y se le cocina; chaguarmishqui es una palabra kichwa que significa agua dulce; la gente lo prefiere tomar caliente”, explicó la comerciante.
El dulce de la cabuya es un negocio que Aída Estrella, madre de María, lo inició desde hace aproximadamente 40 años. Se lo comercializa en vasos equivalentes a 50 centavos y un dólar.