El NO oficialmente avanza en Cotopaxi
Escrutado cerca del 50% de las 861 actas generadas este domingo en las Juntas Receptoras del Voto en la provincia, la tendencia hacia el NO en las 10 preguntas del referendo y consulta popular del sábado 7 de mayo, continua manteniendo una ventaja con casi 20 mil votos (promedio).
Fernanda Iturralde, presidenta de la Junta Provincial Electoral de Cotopaxi, comentó esta tarde que aún es premeditado hablar de una tendencia, sin embargo, garantizó que hasta el jueves esperan concluir con el total del conteo.
Pero, qué ocurrirá si el NO gana en Cotopaxi. No faltarán los malanochados que salgan portando en sus manos la bandera de la victoria, auto atribuyéndose el triunfo, y considerándose como los líderes de la oposición en la región central del país.
Como un humilde ciudadano latacungueño, haciendo uso de mi derecho a la libertad de expresión sin difamación o mala intensión, me atrevo a decir que el NO, de ganar, lo habrá hecho por sus propios méritos.
En Cotopaxi, a lo largo de la campaña, nunca un líder que encabezara la tendencia; repito, no faltaran aquellos que se lo quieran adjudicar. Sin embargo, las razones a mi parecer son las siguientes:
En Cotopaxi el Gobierno no tuvo una figura política real que consiguiera el apoyo para el proyecto. Las marchas de apoyo al SÍ organizadas por los funcionarios del Estado, tuvieron un efecto negativo, ya que la gran mayoría de ciudadanos conocíamos que las personas que ‘apoyaban’, en su mayoría, eran empleados a contrato que ‘brindaron’ su contingente para conservar el empleo.
Y la más importante, la ciudadanía vio con apatía la llegada de más de 20 visitas oficiales (ministros, viceministros) que tuvieron en apenas 15 días los cantones y parroquias.
Al final PAIS tiene la certeza de haber ganado a nivel nacional, y es deber de todos los ciudadanos apoyar aquellos cambios que busquen ejecutarse, respaldarlos en el sentido de que la crítica deberá ser positiva, vigilante, de que el proyecto se ejecute para el bien del país.
Y tanto ‘figuras’ políticas locales del oficialismo y oposición, a reaccionar y buscar nuevas figuras, líderes, gente experimentada que mire el horizonte más allá de sus sueños y más acá de la realidad nacional. El voto en Cotopaxi, no fue a favor ni en contra del señor presidente Rafael Correa, fue un reflejo del sentir ciudadano ante los ‘lideres’ locales, que no cuentan con el respaldo ni siquiera de sus bases.
